El día miércoles 10 de octubre,
en el campus II de la Universidad Dr. José Matías Delgado, se desarrolló el
foro de mujeres líderes, denominado: “Una plática entre amigas”.
El objetivo del evento, era que
las ponentes pudieran compartir con la audiencia, las experiencias, prácticas,
y actitudes que las han llevado al éxito en las ramas y áreas en las que cada
una de ellas se desenvuelve. Aunque la conferencia iba dirigida al público
femenino especialmente, también se notó una interesante asistencia del segmento
masculino.
El grupo de panelistas estaba
conformado por: Mari Carmen Aponte, Embajadora de Estados Unidos en El Salvador,
Gracia Rossi, Gerente General de Microsoft El Salvador, María Cristina Figueroa,
Embajadora de la República de Uruguay en El Salvador, Celina Palomo, Directora
Ejecutiva de FUSAL y Silvia Cuellar, Directora de COEXPORT.
Mari Carmen Aponte, resaltó que los
tres aspectos más importantes para el éxito personal, son: la calidad de
trabajo, la importancia de trascender a las situaciones, y la perseverancia
ante la falta de confirmación de las noticias esperadas. Por su parte, Silvia
Cuellar, mencionó que la clave y estandarte para lograr el éxito es, la
confianza en sí misma y destacó la importancia de “aprender a llegar, donde se
quiere llegar” y de “aprovechar la oportunidad de hablar con las personas que
pueden ayudar, a que se alcance lo que se desea”
Por otro lado, Figueroa señaló
que la “lealtad con todos”, es un elemento determinante en el alcance de los
objetivos personales, así como la calidad del trabajo de forma tal, que las
opiniones vertidas sean escuchadas. Celina Palomo, en cambio, destacó que la
clave del éxito está en la perseverancia y pasión por lograr la diferencia, y
puntualizo que: “las circunstancias nunca deben ser obstáculos, sino motores en
el lucha por los sueños personales”.
Finalmente Gracia Rossi: mencionó
que para lograr el éxito profesional y personal, las personas deben abrirse a
lo desconocido, y poner su talento al servicio de los demás. La conferencia, al final se desarrolló en un
entorno amigable, entre risas de las panelistas y la concurrencia, que había abarrotado
el salón de actos públicos del campus. La
invitación final y general fue a luchar
por hacer y marcar la diferencia, desde el momento y lugar actual, con la firme
convicción de que lo que se da, es lo mismo que se recibe.
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